El sexo al comienzo es un sueño en sí mismo, pero el problema viene dado cuando el sexo comienza a ser rutinario y comienza a aburrir. En ese caso, las personas buscan herramientas para innovar y así conseguir volver a tener ilusión cuando tienen relaciones sexuales. Y para conseguirlo, la imaginación es una gran herramienta que suele dar muy buenos resultados.

La importancia de la imaginación

Como nos han comentado los expertos, la imaginación es una de las herramientas más fuertes que tiene una persona. Con ella se puede disfrutar mucho más del sexo, aunque para conseguirlo es importante saberla usar correctamente. La imaginación no solo se puede usar cuando se busca algo diferente, sino que también se puede usar para vivir experiencias que hasta el momento nunca se habían disfrutado. Para hacernos a la idea, la imaginación se puede usar en los siguientes puntos:

Desinhibidor sexual: si imaginamos cosas, podemos llegar a creer que lo que estamos imaginando es real y en consecuencia se pueden llegar a vivir cosas realmente interesantes. Por ejemplo, dentro de este tipo puede ser una buena opción intentar inventar roles y personajes para evitar caer en la rutina. Aquí es donde entran en juego los disfraces sexuales. Gracias a ellos se puede conseguir creer que lo que se está imaginando es real y así hacer realidad una fantasía sexual que no se podría hacer realidad de manera real.

Carácter lúdico: gracias a la imaginación se puede conseguir jugar con los roles sexuales y así conseguir hacer cosas que de otra manera sería imposible hacer. Por ejemplo, a través de la imaginación una persona puede cambiar su papel lúdico y disfrutar de cosas que siempre había soñado.

tantra palace masajes eroticos en madrid

Beneficios de las fantasías sexuales

Como hemos podido comprobar, la imaginación puede llegarnos a ser muy útiles a la hora de tener relaciones sexuales diferentes y sobre todo hacer realidad las fantasías sexuales. En esas últimas nos vamos a centrar ahora. Vamos a ver cuáles son los principales beneficios que se pueden obtener cuando se practica sexo teniendo en cuenta una fantasía sexual. Por supuesto, esas fantasías sexuales tienen que tener un equilibrio y realizarse cuando las personas afectadas están de acuerdo. Sin olvidar que no solo hay que hacer realidad la fantasía de una sola persona, sino de las dos.

  • Aumento de la autoestima: se ha demostrado que a través de la imaginación y en consecuencia de las fantasías sexuales, las partes afectadas pueden aumentar su autoestima. Eso se debe a que una persona se siente más segura de sí misma, ya que está haciendo otro papel. Además, la pareja se siente mucho más deseada y además se deja de lado lo negativo de la persona. Incluso puede ser una buena opción para solucionar problemas sexuales de una persona.
  • Aumento del deseo sexual: las fantasías sexuales acompañadas de la imaginación son una combinación perfecta para romper la rutina y pensar que vivimos experiencias que serían imposibles en el día a día. Además, las fantasías sexuales ayudan a que la sexualidad se vea desde otro punto de vista y no solo el de la penetración. Y al eliminarse los miedos, se consigue que las relaciones sean más espontáneas.
  • Mejoran nuestra imaginación: otro punto positivo es que la imaginación evoluciona mientras disfrutamos. Cuanto más se usa esa técnica, más vuela la imaginación y más fácil es conseguir hacer realidad otras cosas. Algunas personas piensan que así la imaginación se gasta, pero realmente es, al contrario.
  • Más probabilidad de orgasmo: se ha demostrado que a través de esta técnica es más fácil que ambas partes puedan llegar al orgasmo, siempre y cuando se crean la situación que están imaginando. A través de las fantasías sexuales se consigue aumentar la estimulación y en consecuencia es más fácil llegar al placer. Por supuesto, todo eso hace que la creatividad esté asegurada y en consecuencia la unión de pareja sea más fuerte.
  • Autoconocimiento: aunque pueda parecer mentira, imaginando que somos otra persona o vivimos una situación que no es la nuestra, podemos conocernos más a nosotros mismos. Gracias a esas experiencias, una persona puede llegar a saber qué es lo que le gusta y no le gusta. Es decir, en cierta manera ayuda a que tengamos una visión más completa y en consecuencia podamos disfrutar más de la sexualidad que tenemos por delante.
  • Se puede hacer a cualquier edad: algunas personas tienden a pensar que las fantasías sexuales son solo para los jóvenes, pero no es así. Están para que todo el mundo las pueda disfrutar y así disfrutar de la sexualidad un poco más y desde un punto de vista diferente. No importa si la persona es joven o mayor, lo importante es que se crea la situación que está imaginando y así pueda disfrutar al máximo.
  • Ayuda a afrontar problemas: si se hace bien, la imaginación puede aislarnos de nuestros problemas y hacer cosas que antes nos parecían imposibles. Puede ser una buena opción para solucionar algunos problemas sexuales. Tanto de hombres como de mujeres.
  • Reducción del estrés y ansiedad: como bien sabes, vivimos en una sociedad que cada vez sufre más estrés. Y aquí es donde entra en juego la imaginación y las fantasías sexuales. Con ellas no solo nos vamos a entretener pensando que somos otra persona, sino que además nos podemos relajar porque la imaginación hace que la mente se olvide durante un tiempo de los problemas del día a día. Si notas que no tienes ganas de tener sexo con tu pareja por culpa del estrés, opta por crear una fantasía sexual. Te podrás aislar, notarás erotismo y en consecuencia te será más fácil volver a disfrutar del sexo. Al fin y al cabo, la gran mayoría de problemas son psicológicos y se pueden tratar si se hace un buen trabajo con la mente.