Uno de los masajes eróticos que más están dando que hablar son los denominados masajes glanderianos y cuentan con una serie de beneficios que ayudarán a que el hombre pueda experimentar más placer que con otro tipo de masajes, aparte de que le supondrá una mejora en su salud sexual que conocerás en este artículo donde también te hemos querido recoger las características de cómo debe ser un correcto masaje glanderiano, al igual que su definición.

 

¿Qué es el masaje glanderiano y en qué consiste?

Para que conozcas en qué consiste el masaje erótico glanderiano, conviene que tengas unos pequeños conocimientos en anatomía masculina, debiendo de saber que el miembro masculino se podría dividir en diferentes partes. Por un lado tendríamos los testículos, mientras que en el pene nos encontraríamos, además del prepucio y el frenillo, una parte alargada que llamaremos cuerpo del pene, mientras que el extremo o punta será la que denominamos glande.

El glande es una de las zonas más sensibles del cuerpo del hombre, teniendo un tamaño por lo general más voluminoso que el tronco del pene. A pesar de ser una de las zonas que más estímulos va a recibir, es una de las más olvidadas tanto si hablamos de los masajes como también de las relaciones sexuales, centrándose la pareja en el tronco, cuando esta zona, a pesar de ser la que más se nota dura en la práctica y en la excitación, no es la que más sentirá.

Características del masaje glanderiano

Para que se pueda dar un correcto masaje en el glande, lo conveniente es que se realice con total tranquilidad y relajación, centrándonos en los sentidos, pudiendo hablar con el hombre receptor para que de esta manera se pueda encontrar el punto donde más placer se obtenga y de esta manera usarlo como punto importante en el masaje. Cabe destacar que este tipo de masajes eróticos no busca el simple hecho de terminar con un orgasmo y que cuanto antes se realice mejor, sino que conviene que el estímulo y la excitación vayan subiendo lentamente para que de esta manera, el momento del clímax sea mucho más satisfactorio, más intenso y disfrutable que con cualquier otro.

Para el masajista, el trabajo consistirá en acariciar la zona, pudiendo hacer uso por supuesto del resto del pene, de los testículos o de la zona perineal, sin embargo, todo deberá centrarse en el glande pero, en el momento en el que el hombre que recibe el masaje siente que está próximo el orgasmo, reducir la marcha para que esa sensación de placer se mantenga y pueda ser usado en beneficio para acumular dicha tensión sexual y explotar en el momento indicado.

Como en cualquier masaje erótico que se haga en condiciones óptimas, es imprescindible que el ambiente esté acondicionado para disfrutar más de la experiencia. Para esto, será conveniente el uso de un futón en el suelo o de un colchón cómodo, para que la persona pueda tumbarse con tranquilidad boca arriba mientras que el masajista realiza los movimientos experimentados para este fin. La habitación deberá de estar tranquila, sin ruidos exteriores, ya que esto podría descentrar al hombre, pero sobre todo, le quitaría el toque místico a toda la experiencia, por lo que asegúrate de que la habitación o sala cuente con muy poco ruido y que si existe algún sonido, que sea el de una radio en la que poder poner música zen para relajar o chill out, puesto que estamos seguros que esta experiencia con música e incluso bajando la luz de la sala y agregándole incienso o aromas podrás hacer que la experiencia sea irreemplazable.

Los masajes glanderianos se deben de realizar con aceites esenciales y lubricantes indicados para estas partes del cuerpo con el fin de que las manos resbalen mucho mejor por el pene y por el glande, pudiendo hacer presión en las zonas más estimulables y también en aquellas zonas más sensibles realizar caricias que puedan poner al hombre en una excitación sin precedentes.

 

Beneficios de los masajes glanderianos

Si todavía no te has decidido a disfrutar de un masaje erótico glanderiano, te vamos a exponer otra serie de ventajas y beneficios para que puedas comprender que, una vez que has descubierto todo el potencial que tiene tu glande en tu pene, no va a ver otra forma de que puedas quitarte de la cabeza el placer directo que vas a sentir.

Para que puedas tener unas erecciones con más intensidad, el masaje ayudará a que el riego sanguíneo del pene sea mucho más intenso, puesto que al sentir más en dicha zona, se le mandará más sangre y por lo tanto, el tejido eréctil del pene se sentirá más potente, más fuerte y por lo tanto, podrá responder mejor en cualquier relación sexual que venga después del masaje erótico. Esto es todo un punto a favor porque incluso con un simple roce lograrás que tu miembro esté mucho más rápido erecto, sin necesidad de darles grandes estímulos, haciendo que la persona que disfrute de él, pueda sentirse agraciado.

Los masajes eróticos también ayudan a que la persona pueda relajarse en todos los sentidos, se piensa que la excitación puede hacer que la persona entre en tensión, sin embargo, cuando un hombre recibe un masaje glanderiano sin prisas, sentirá que su cuerpo va entregándose lentamente a la pasión y a los estímulos que están haciendo que su experiencia sea más que enriquecedora.

Al no estar todo centrado en el sexo tal cual, la persona siente más deseos de tener relaciones sexuales, por lo que aumenta el apetito sexual, consiguiendo que sea mucho más disfrutable cuando llega el momento. Este deseo sexual ayudará de igual manera a que el hombre recupere su intensidad y también a combatir la disfunción eréctil, por lo que las relaciones sexuales serán siempre satisfactorias.

De igual modo, en el caso de los hombres que sufren eyaculación precoz, el masaje glanderiano ayudará a que conozcan más su cuerpo, sus estímulos y de esta manera poder controlar la eyaculación. Se ha comprobado que, aquellos hombres que han experimentado eyaculaciones precoces en su vida, cuando reciben un masaje erótico en el glande, mejoran notablemente de esta afección.