Como dijo un día un buen amigo mío, “por suerte cada persona es un mundo, sino el mundo sería muy aburrido”. Y yo pienso igual, si todos fuésemos iguales nos terminaríamos por aburrir. Pero por suerte cada uno es de su padre y de su madre y le gustan diferentes cosas. Gracias a esa variación de pensamientos, cada persona tiene diferentes fantasías sexuales. Muchas de esas personas tienen la suerte de hacerlas realidad alguna vez en su vida, pero otras no. Y es lo peor que se puede hacer en esta vida, dejar las cosas sin hacer por miedo al qué dirán.

Lo que está claro es que todo el mundo tiene fantasías sexuales. Algunas de esas fantasías sexuales son clásicas, mientras que otras son realmente raras. Hoy nos vamos a centrar en las más raras e inusuales. Así podremos abrirnos a nuevos horizontes. Y quién sabe, igual alguna de las siguientes te llama la atención, la prácticas y disfrutas como nunca lo habías hecho.

1- Voyeurismo

Es una de las más raras, pero a su vez de las más conocidas. Esta fantasía sexual consiste en disfrutar mirando y sobre todo espiando a otras personas. Dependiendo de la persona, la excitación se puede conseguir de una manera u otra. Por ejemplo, hay algunas personas que se llegan a excitar con el mero hecho de espiar a una persona o a una pareja. Mientras que otras necesitan espiar a esas personas cuando están en ropa interior, desnudos, en una actitud cariñosa… Cada persona tiene sus gustos. Lo que sí suele ser común es que la persona tiene que ser consciente de que nadie sabe qué les está espiando o el placer se pierde.

2- Exhibicionismo

Es otra de las fantasías sexuales “raras”. Lo pongo entre comillas porque es otra de las fantasías más comunes dentro de las inusuales.

En este caso, la persona que quiere disfrutar del sexo intenta ponerse en situaciones de riesgo, con el objetivo de ser visto por terceras personas. Para conseguirlo, siempre busca tener relaciones sexuales en lugares públicos. De esa manera, el exhibicionista comienza a obtener la excitación cuando se da cuenta que está siendo observado. Para conseguir esa excitación se desnuda o simplemente busca enseñar los genitales a otras personas desconocidas. Además, muchas personas consiguen la excitación en zonas que saben que son frecuentadas por personas voyeur a las cuales les gusta mirar. El problema de esta fantasía sexual es que se puede ir en contra de la voluntad de las otras personas.

También es importante dejar claro que la mayoría de los exhibicionistas son hombres, pero también hay mujeres que tienen en la cabeza esa fantasía sexual. Aunque es verdad que suelen ponerla en práctica menos por diferentes miedos.

3- Agalmatofilia

Esta sí que es una de las fantasías sexuales más raras que nos vamos a encontrar. Suele ser muy poco común, pero merece la pena hablar de ella.

Una persona agalmatofilia se caracteriza por sentirse atraído por las figuras, maniquíes o muñecas entre otros. Dependiendo de la intensidad que se tenga, la persona puede conseguir la excitación sólo mirando, cuando está completamente desnuda o cuando la figura o muñeca tiene una posición sugerente. Por supuesto, hay personas que consiguen la excitación sólo mirando, mientras que otras personas necesitan tocar el objeto para obtener ese placer. Y aunque es muy poco nombrada, el estudio ha demostrado que es más común de lo que parece, aunque pocas personas afirman disfrutar de esa manera. Teniendo en cuenta los últimos estudios, es más común en los países del norte.

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4- Amomaxia

Suele ser una fantasía sexual normalmente en parejas jóvenes, sobre todo las que no tienen un sitio donde tener la intimidad que una pareja debería tener.

Se dice que una persona disfruta de la amomaxia cuando solo disfruta de las relaciones sexuales cuando las tiene en el coche. Si esa persona tiene la relación sexual en otro sitio como una cama o baño, no disfruta. Solo lo hace cuando lo hace en el interior del vehículo. Además, muchas de esas personas en cierta parte consiguen la excitación cuando el riesgo de ser pillados crece. Por ese motivo, se suele tener relaciones sexuales en parkings. La temperatura sube y el placer está asegurado por la excitación del riesgo acompañada del vehículo.

5- Misofilia

En este caso, la persona consigue la excitación cuando tiene contacto y puede interactuar con ropa usada. Para conseguir esa excitación la prenda debe desprender un olor. Normalmente la excitación se consigue con ropa interior, pero también hay personas que la consiguen con otras prendas que desprenden un olor fuerte. Hay que recordar que la misofilia hace que las personas se excitan con bastante facilidad en lugares que están sucios o tienen un olor desagradable. La misofilia es apta tanto para una relación sexual como para una masturbación.

6- Salirofilia

La salirofilia se produce cuando una persona se excita cuando es capaz de arruinar o ensuciar la imagen de una persona. Para conseguirlo puede usar diferentes herramientas. Pero lo más común suele ser sentir placer cuando escupe a la otra persona, le arranca la ropa o lanza fluidos sexuales al cuerpo de la otra persona.

7- Hierofilia

Consiste en obtener placer cuando se tiene contacto con objetos religiosos. Para hacernos a la idea, el placer se tiene cuando se tiene entre la mano una cruz, biblia o un rosario.

Además, son muchas las personas que acuden a los diferentes actos religiosos para comenzar a hacer crecer la pasión. También es común que acudan a confesarse a un confesionario y mientras lo hacen disfrutan de placer. Normalmente son personas que viven a un nivel muy alto la fe.